52 SEGUNDOS: el vuelo más corto para un salto en paracaídas intencionado

Bruno Brokken, paracaidista profesional con casi 40 años de carrera, realizó su primer salto en 1980 y siete años después, aterrizó desde su Bélgica natal en las costas soleadas de Empuriabrava, la que convirtió en su nuevo hogar hasta el dia de hoy. En 1987 ya llevaba más de 1000 saltos a sus espaldas y se introdujo profesionalmente en el deporte trabajando para Skydive Empuriabrava, que, por ese entonces, ya era pionera en la instrucción del curso de paracaidismo (AFF) y Saltos Tandem en Europa. En el 1988 comenzó su carrera como cámara profesional de paracaidismo. Desde 1992, año en que ganó su primer campeonato del mundo, ha participado en gran número de récords y eventos de escala mundial. Su destacada trayectoria como fotógrafo y vídeo aéreo, se ha convertido en una de las más referenciadas en el mundo del paracaidismo. Con Skydive Empuriabrava ha trabajado capturando un sinfín de imágenes para numerosas producciones y anuncios de primeras marcas mundiales. Además, este año ha sido reconocido en el museo internacional de paracaidismo “Hall of Fame”.

Brokken sigue innovando en el mundo del paracaidismo y ésta vez lo ha hecho realizando un salto en paracaídas en el mínimo tiempo de ascenso posible. Lo ha logrado utilizando el avión de paracaidismo con la velocidad de ascenso más rápida de Europa, el Beech 99, pilotado por el experto piloto Eduard Simó. Este avión forma parte de la flota permanente de la que dispone Skydive Empuriabrava para realizar sus actividades y en tan solo 52 segundos el avión despegó y llegó a la altura para que Brokken pudiese saltar y conseguir el vuelo más corto de paracaídismo para un salto intencionado que jamás se ha hecho.